La Habana, 3 de noviembre.- Convencidos de los graves perjuicios que por más de 60 años ha provocado el bloqueo impuesto por el Gobierno de EE. UU. a Cuba, representantes de varios grupos diplomáticos y políticos del mundo, así como de numerosas naciones, ratificaron durante la jornada de clausura de la Asamblea General de las Naciones Unidas, su respaldo al proyecto de resolución cubano para poner fin a esa política genocida.
Así lo hicieron saber no solo con sus votos, sino también con sus valientes y contundentes intervenciones en la plenaria de la ONU.
El representante de Nicaragua, al respecto, señaló su posición en común con el G77 y China, el MNOAL, la CELAC y, en nombre de la comunidad de países amigos, afirmó que esa política exterior imperial va en contra de las Naciones Unidas y su Carta Magna.
«El bloqueo –dijo– violenta los derechos de todo un pueblo y socava su desarrollo, impidiendo el cumplimiento de la agenda 2030».
Como una violación de los derechos humanos de un pueblo entero calificó la representación de Bolivia la persistencia del bloqueo económico, comercial y financiero que el Gobierno de Estados Unidos impone a Cuba desde hace más de 60 años.
Durante su intervención ante el plenario, el país sudamericano agradeció a la Isla por su comprometida solidaridad con las causas más nobles de la humanidad.
«Sus soldados de la salud han estado a lo largo del planeta. Los pueblos del mundo hemos sido testigos de que 60 años no han sido suficientes para castigar a un pueblo solidario», destacó.
Por su parte, el representante de Gabón expresó que el bloqueo tiene consecuencias cada vez más nefastas para la población, y pone en peligro la convivencia pacífica entre estados.
La República Islámica de Irán se adhirió a las posiciones de organizaciones internacionales y de países que rechazan el bloqueo contra Cuba, porque «no ha beneficiado a nadie».
También Belice se sumó a la declaración de los grupos regionales que apoyaron la Resolución cubana, y su representante señaló que no hay ningún Estado miembro que esté por encima de la ley. Rechazó, además, la designación de Cuba como país patrocinador del terrorismo, una medida que, según sus palabras, exacerba las consecuencias inhumanas del bloqueo.
El representante de Brasil se refirió a los enormes daños en el plano económico que esta política ha provocado, y afirmó que «ha afectado el pleno disfrute de sus derechos al pueblo cubano».
Por Chile se reconoció que el bloqueo «genera escasez y sufrimiento para toda la población cubana» y su representante lamentó «el hecho de que siga vigente».
La representación de Perú dijo que «las sanciones deben ser eliminadas de inmediato» y agregó que el bloqueo es contrario a los principios de la Carta de la ONU y del derecho internacional.
También se sumaron al reclamo internacional para poner fin al bloqueo de EE.UU. contra Cuba, países como Jamaica, Egipto, el Congo, y Barbados.
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