Más de setenta países han decidido responder hoy al llamado que realizamos desde Europa por Cuba para la realización de una Caravana Mundial contra el bloqueo genocida impuesto a Cuba por los Estados Unidos de América. Algunos cubanos y amigos solidarios iniciaron ya sus manifestaciones en la jornada ayer; otros continuarán esta lucha simbólica de una u otra forma mañana, en muchos rincones, ciudades y países del orbe.
La política de un gobierno que desde los primeros días del triunfo revolucionario de enero de 1959 permitió que exmilitares y exministros batistianos robaran 400 millones de USD de las entidades bancarias cubanas, y no tardó en dictar múltiples medidas de asfixia económica a la nación caribeña, no solo es injustificada y arbitaria, sino que por sus propósitos y consecuencias es totalmente ilegal y jurídicamente un crimen. Cumple con todas las condiciones necesarias y suficientes para que se le considere un “genocidio”, por constituirse como un “conjunto de medidas implementadas con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”.
Los fundamentos de esta política contra Cuba, la intención de aniquilar la existencia misma de su pueblo privándolo de dinero y suministros, de reducir sus recursos financieros y de provocar hambre y desesperación, fue plasmada desde el seis de abril de 1960 en un memorándum secreto del Departamento de Estado (escrito como bien sabemos por el Vice Secretario de Estado Asistente para los Asuntos Interamericanos Lester D. Mallory) y acompañado de viles estrategias para hacer ver que la causa de tales desventuras pueden hallarse en la ineficiente gestión del gobierno cubano y no en las “sanciones” de Washington. El principal objetivo de esta política, es frustrar la voluntad de la mayoría de los ciudadanos de un país de mantener la soberanía que tantos años de lucha y de sacrificio ha costado al pueblo cubano.
Quienes por ignorancia, desinterés o persiguiendo dudosos fines que se alejan de la voluntad de la mayoría restan importancia al bloqueo ora repitiendo la mentira institucionalizada del “embargo”, ora vaciando de sentido el término mismo diciendo que es “interno”, se hacen cómplices de las maniobras tendenciosas y rejuegos lingüísticos tras los cuales el gobierno de Estados Unidos y sus medios de comunicación, intentan escamotear y distorsionar desde hace ya seis décadas el verdadero sentido del bloqueo y sus consecuencias. En estos tiempos en que Cuba lucha por la vida de sus ciudadanos y apoya la batalla internacional contra la terrible pandemia de COVID-19, esta política criminal se ha mostrado en toda su crueldad al prohibir la entrada a Cuba de medios de protección, de respiradores artificiales y de otros insumos médicos que pueden salvar vidas, y ha dictado además más de 240 medidas para entorpecer el desarrollo socioeconómico de un país pobre, muestra del desinterés que tiene Estados Unidos por los derechos del pueblo de Cuba, por la vida de sus ciudadanos y el irrespeto de su independencia nacional y de su legítimo derecho a la autodeterminación.
El Bloqueo mata porque es un acto de guerra económica impuesto por un imperio a una pequeña nación del tercer mundo. Seamos cada vez más las voces que en este planeta salen a defenderla a Cuba y a exigir el cese de esa política cruel, inhumana y deshonrosa.
¡ABAJO EL BLOQUEO GENOCIDA CONTRA CUBA!
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